AMBOSELI

 

 

 

 

El Kilimanjaro es, sin duda, el símbolo de Amboseli

 

La última etapa de nuestro viaje, comenzaría el lunes 21 de agosto. Salimos temprano de Nairobi para Amboseli. Tras la bacanal del Carnivore, el cuerpo de algunos (yo, entre ellos) no estaba para viajar, pero ya sabéis que el tiempo vuela. Así que, sin pausas, salimos para Amboseli, unas cuatro horas de viaje, como casi siempre, duro y lleno de baches. La primera parte va por la autopista (?) de nairobi a Mombasa, una carretera repleta de tráfico y en donde los accidentes mortales son, por desgracia, bastante frecuentes.

Pero olvidemos ahora cosas negativas y centrémonos en nuestro destino. Amboseli no sólo es la posibilidad, difícil, de ver el Kilimanjaro, la montaña más alta de África. También es un destino con mucha y variada fauna, y con la presencia del pueblo maasai, mezclándose en esta zona los maasai tanzanos ocn los kenyatas. En esta parte, los maasai son, digamos, más "auténticos" que en Mara, y sería aquí donde los visitaríamos. Para los amantes de la avifauna, Amboseli es un buen destino. Aunque su aspeco es árido y seco, alberga varios humedales en su interior, muy interesantes.

Una jirafa maasai (Giraffa camaleopardis tippelskirchi)

 

Como os decía, el Parque Nacional de Amboseli ofrece una de las imágenes más clásicas de Kenya, la enorme montaña del Kilimanjaro, con sus 5.985 m dominando la llanura como un Dios poderoso gobernando el mundo desde su trono de plata. Antes de que el misionero Johannes Rebmann descubriese el Kilimanjaro para la cultura occidental en 1848, las antiguas leyendas swahilis y árabes hablaban de una montaña en el interior, en cuya cumbre vivía un dios terrible que castigaba a los que se atrevían a acercarse a su morada paralizándoles los pies y las manos. De esta manera, los habitantes de la costa tropical describían un fenómeno extraño para ellos, la congelación. Curiosamente, el Kilimanjaro no está dentro de los límites de Amboseli, de hecho ni siquiera está en Kenya. Pero los tanzanos aún no han encontrado la manera de evitar que una de las vistas más famosas de su montaña sea la que ofrecen sus vecinos.

El Parque Nacional fue creado en 1974 con una extensión de 392 km², aunque está rodeado por una reserva mucho más grande ocupada por el pueblo Maasai. Amboseli está situado en la provincia del Rift Valley, junto a la frontera tanzana al noroeste del Kilimanjaro. A pesar de las altas temperaturas, las tierras de Amboseli se encuentran por encima de los 1.180 m de altura. Las cumbres de la montaña permanecen ocultas por las nubes durante gran parte del día. El mejor momento para tener la oportunidad de divisar su cabeza plana es al amanecer. El territorio de Amboseli pertenece al país Maasai, la legendaria tribu guerrera de nómadas pastores que se alimentan de una mezcla de sangre y leche. Los Maasai continúan viviendo hoy como lo han hecho siempre en la reserva que rodea el parque, pastoreando sus rebaños y desplazando sus enseres en busca de los mejores pastos. A lo largo de sus migraciones, hoy restringidas, los Maasai construyen sus poblados, los llamados enkang’ o más popularmente manyatta o emanyata, con palos de madera y estiércol de vaca. Con sus cuerpos esbeltos, sus rostros hieráticos y orgullosos, sus atuendos coloridos y sus cabellos trenzados y teñidos de rojo, los Maasai ofrecen una gran plasticidad para el fotógrafo, pero nunca les retrates sin su permiso.

Amboseli se encuentra a unos 240 km al sudeste de Nairobi. Es un ecosistema muy frágil, sometido a grandes variaciones estacionales. Fundamentalmente el terreno es seco, con pocas precipitaciones anuales, entre los 350 y los 400 mm. El sector noroccidental del parque está ocupado por el lecho del Lago Amboseli, que durante gran parte del año no es más que una inmensa sartén ardiente de tierra salina cuarteada en la que revolotean los torbellinos de polvo. Los espejismos se confunden con los rebaños de cebras y ñúes, que caminan por el lecho cabizbajos y en fila india, con un aire cansino y perdido.

 

Uno de los típicos tornados de Amboseli

 

La inmensa llanura comienza en el lecho seco del lago Amboseli, que da la bienvenida al visitante con su imagen desoladora. Hacia el sur y el este aparece la zona denominada Ol Tukai, un parche de vegetación frondosa donde se sitúan algunos de los lodges. Al sur de éstos aparece un bosque de palmeras, un oasis de frescor que proporciona agua, sombra y refugio a multitud de animales. A ambos lados del bosque de palmeras se extienden las zonas pantanosas, y en la parte occidental se alza la Observation Hill, la única elevación del terreno, una suave colina a la que se asciende a pie y que ofrece un magnífico panorama del parque. Más al sur, los estratos de roca volcánica arrojada por el volcán hace cientos de años afloran a la superficie, convirtiendo el paisaje en un malpaís.

El frágil ecosistema de Amboseli alberga una impresionante variedad de animales, con más de 50 especies de mamíferos. Sin duda los reyes de Amboseli son los elefantes, que se encuentran en gran número y a los que es fácil observar y fotografiar gracias a las características del terreno, llano y escaso de vegetación. Respecto a las aves, se han registrado más de 400 especies, entre las que destacan el pájaro secretario o serpentario, grulla coronada, garzas, garcilla bueyera, ganso egipcio, avestruz Maasai, marabú, etc., etc.

En esta ocasión nos alojamos en el Amboseli Sopa Lodge. Se trata de un lodge que está fuera del parque, a unos 20' en furgoneta de la entrada. La decoración es étnica y sencilla, y la comida es muy básica. El primer día nos dieron unas habitaciones impresentables, pero tras la oportuna protesta, con intermediación de Viatges Ter, nos dieron otras mucho mejores. Eso sí, el entorno es muy bello, y sin duda, es el mejor situado a los pies del Kilimanjaro. Un paseo por los jardines del lodge, se convierten per se en un safari. Y si váis allí, no dejéis de visitar el Hemingway's Bar. Por la noche ponen comida para atraer a las hienas y otros animales nocturnos.

Veamos unas imágenes de los dos días que pasamos en este parque:

 

Ejemplar de ñu de la subespecie que hay en Amboseli (Connochaetes taurinus albojubatus)

 

El pájaro serpentario o secretario (Sagittarius serpentarius)

 

Retrato de un macho de babuino amarillo (Papio cyanocephalus)

 

Otros dos yelow baboons (Papio cyanocephalus), madre e hijo

 

Imagen de los elefantes (Loxodonta africana) en los humedales

 

Los elefantes (Loxodonta africana), al caer el Sol, dejan los pastizales y humedales y se retiran a la zona arbolada, en los márgenes del parque. Es el momento para ver su paso, y, con la ayuda del crepúsculo, captar imágenes tan bellas como esta.

 

La belleza de las puestas de Sol africanas es legendaria. Qué más se puede decir !

 

Oriol, a la entrada del Amboseli Sopa Lodge (foto de Carme Pérez-De-Gregorio)

 

El martes 22 de agosto, hicimos un safari de mañana muy completo, con visita al mirador y al poblado maasai. Por la tarde, haríamos el último safari por Amboseli, y el Kili, aunque tímidamente, se dejó ver:

Un gran macho de elefante (Loxodonta africana), de.....¿cinco patas?

 

Un precioso grupo de grullas coronadas (Balearica regulorum)

 

Cuando íbamos de paso al mirador de Amboseli, mi hijo Oriol de 8 años, todo un explorador, gritó: para, para ! había visto a lo lejos un cadáver de ñu devorado por unas hienas, mientras los buitres esperaban turno.

Al fondo, cebras, gacelas y ñues, siguen pastando. Es la ley de la sabana. Ese día vimos cuatro hienas comunes o manchadas (Crocuta crocuta)

 

A veces, los buitres no respetan el turno y las hienas se enfadan.....

 

Una jacana africana (Actophilornis africanus), en la zona de humedales, muy rica en avifauna.

 

Oriol en el mirador de Amboseli. Se trata de un promontorio desde el que se divisa una vista espectacular. En la laguna hay numerosas aves y un nutrido grupo de hipopótamos.

 

En el techo del observatorio, se posaban bellos ejemplares del estornino soberbio (Lamprotornis superbus)

 

Bajando del mirador, esta sorpresa !

 

A continuación, antes de ir a comer, visitamos un poblado maasai. Parece increible cómo prosperan en una zona árida y volcánica, a los pies del Kilimanjaro. Quién sabe cuánto tiempo seguirán conservando su tradicional forma de vida !

 

El baile maasai, con sus famosos saltos. Cuánto más alto, más valor para el guerrero

 

Otro momento del baile en nuestro honor

 

Haciendo fuego a la manera tradicional.....

 

Los niños del poblado prestos a enseñarnos unas canciones

 

Nuestro guía maasai nos enseña el interior de su casa

 

Una familia a la puerta de su choza

 

Madre e hijo (Foto de Santi Baone)

 

Un grupo de cebras comunes (Equus quagga bohemi). Al fondo, ñues.

 

Una jirafa maasai y una gacela de grant (Gazella granti), comparten un arbusto

 

Tras la visita, regresamos al Sopa Lodge para comer y descansar un poco, ya que a las 16 h., salíamos otra vez de safari. Nuestro último safari en Kenya !

 

Detalle del exterior de las habitaciones (Foto de Carme Pérez-De-Gregorio)

 

Interior de la habitación, una vez nos dieron las "buenas" !!

 

Imagen de la piscina del Sopa Lodge de Amboseli

 

Una mariposa (Belenois calypso), fotografiada en la piscina del lodge

 

En esta zona, los lagartos son del Barça !

 

Para el último safari, hubo separación de sexos. Las nenas se fueron con Mawara y los niños con Macharia.

 

De repente, el Kilimanjaro se dejó ver tímidamente, al fondo

 

Un precioso ejempar de jirafa maasai al atardecer, con el Kilimanjaro de fondo. Es el sueño de África

 

La última puesta de Sol en la sabana fue tan bella como todas.

 

Antes de irnos a dormir, pudimos ver una hiena rayada (Hyaena hyaena) desde el observatorio del Hemingway's Bar del Sopa Lodge. Fue un colofón perfecto, ¿ o no ?

 

La mañana del día 23 de agosto, nos levantamos temprano, sobre las 5'30 h. nada más abrir la puerta de la habitación, un maasai nos dijo: "Kili, good". Comprendí el mensaje en seguida. Cogí la cámara de fotos y me encontré con esto:

El Kilimanjaro despejado al amanecer !

 

Aunque el Kili se llevó el protagonismo, la foto del día fue la de esta preciosa carraca (Coracias caudata)

 

 

 

INDICE

INTRODUCCIÓN

SHABA - SAMBURU - BUFFALO SPRINGS

MOUNTAIN LODGE (ABERDARES)

LAGO NAKURU - LAGO NAIVASHA

MAASAI MARA

NAIROBI

 

 

 

 

 

 

 

Todas las fotos, salvo que se diga otra cosa, son de Miquel À. Pérez-De-Gregorio.© Qualquier sugerencia, crítica o comentario, serán bienvenidos a miquelpg@gmail.com